miércoles, 16 de junio de 2010

ABRIENDO MI CORAZON


Cuando supe tu diagnóstico, la situación no fue nada fácil de afrontar, inicialmente creí que era la pérdida de muchos de mis sueños como madre. El tiempo que ha transcurrido y tus avances me ha demostrado que eso no era cierto.

Pero trate (no se si lo logre) de asumir tu diagnóstico de la forma más madura que pude, aunque hoy sé, que para tamaña estocada no hay madurez emocional que valga.
Pero como pude lo superé, trate de echar mi dolor en la espalda para seguir; para levantarte todos los días con la mayor predisposición para ayudarte y así lo hice.

Durante algunos meses mi producción laboral bajo pero me cuide de que no fuera evidente, de tal manera que mi jefe no tuviera quejas de mi trabajo. Es que a parte del costo emocional, el autismo en este país (como ya lo comenté en otras entradas) tiene un costo económico bastante alto, así que no podía darme el lujo de descuidar una de las principales fuentes de recursos para tu “recuperación”.

Pero en ese andar, deje de lado algunas cosas muy importantes, entre ellas el contacto con mis amigas, sobretodo con mis entrañables amigas de la infancia. Aquellas con las que pase mis mejores años, con las que inicie la etapa escolar (a los 5 años) y termine el colegio cuando muchas bordeábamos los 16.
Durante 11 años, nos la pasamos “pipa” (como dicen los españoles), compartimos muchísimas anécdotas, salimos en un montón de actuaciones, nos disfrazamos de todo lo que se nos ocurrió, imaginamos historia inverosímiles que tuvimos el desparpajo de plasmarlos en un diario (como la conexión de un túnel secreto entre el convento de las monjas de nuestro colegio y la iglesia regentada por unos curas franciscanos), nos metimos en un cuartel de militares y pedimos prestado material subversivo que inocentemente paseamos por toda la cuidad, con tal de hacer un reportaje sobre “héroes anónimos”, entrevistamos a un sacerdote de bajo rango y lo hicimos pasar por una entrevista al monseñor. Sin preocupación alguna, más que el de estudiar y divertirnos.
Hoy a pesar del tiempo transcurrido seguimos en contacto, si no es físicamente al menos el ciberespacio nos permite conocer donde y como estamos. Nos hemos acompañado en baby shower, en matrimonios, en bautizos y nacimientos, también en enfermedades y en encierros físicos.

Yo siempre fui muy asidua a asistir a las reuniones, pero poco a poco mis obligaciones maternales y profesionales hicieron que cada vez mi ausencia fuera más evidente. Tampoco les comenté tu diagnóstico aunque muchas veces estuve a punto de hacerlo, es que no quería arruinar el día, la tarde o la noche, además que tampoco quería derramar lágrimas esas que no llore al confirmar tu diagnóstico y que hoy poco a poco derramo celebrando tus avances.

Pero mi ausencia prolongada y el hecho de comprometerme y a última hora no poder asistir fue el detonante para escribirles una pequeña nota (vía correo electrónico), a las que considero las más cercanas, contandoles los motivos por los que me mantuve alejada y dándoles la dirección de este blog.

Sin lugar a dudas, ha sido una de la mejores cosas que pude haber hecho, desde que inice el día recibi algunas llamadas por teléfono, mail muy emotivos que me hicieron sentir muy querida y reconfortada. La verdad que quisiera contestar una por uno sus mensajes, pero tengo en mi escritorio una ruma de pendientes, por lo que decidi hacer esta entrada para agradecerles a cada una de ellas……a mis hermanas de corazón.
Mil gracias a Helena, Dorita, Carmen, Carola, Lourdes y Rosita.
Las quiero

5 comentarios:

Marina dijo...

Pensalo así, Rosio: ahora tenés a tus amigas de la infancia, las que siempre van a estar ahí, para compartir desde recuerdos hasta proyectos; y las amigas bloggeras, que siempre vamos a acompañarte en lo que necesites.
Muchos besos!!!

caro y facu... dijo...

hola posio que bueno lo que hiciste con tus amigas creo es dificil contarlo y sobre todo dejar el trabajo que en tu caso en una fuente de ayuda para mika,pero hay que priorizar lo bueno es que lo pudiste hacer y para ver ellas que no es que quieras perder su amistad o algo,besossssssssssssssss,lamnetablemente por muchas cosas el autismo cambia todo en nuestra vidas.......

María dijo...

Que aventuras Rosio, que tiempos aquellos verdad. Yo también sigo en contacto con mis amigas del cole aunque no las veo todo lo que me gustaría, porque cuando viajo a Madrid siempre voy con prisas, pero cuando nos reunimos para una cenita lo pasamos bomba!!
Me alegro de que te estén dando tanto apoyo.
Muchs besos

maria gloria dijo...

Rosio la amistad es lo mas lindo que existe y tener amigas es tener un tesoro, te felicito por conservarlas , muchos besitos a Mika

Unknown dijo...

Linda entrada Rosio..
La verdad que desde el diagnostico nuestras prioridades cambian y tambien es cierto que a veces necesitamos un tiempo para decirlo a nuestras amistades.. Hasta el dia de hoy algunas de mis mejores amigas solo saben que algo tiene Manuel pero en detalle no les he contado.. Ojala pronto me decida...
En mi caso con el diagnostico mi circulo de amistades cambio... Porque tal vez tengo una idea erronea que debo cambiar...
Pero mis nuevas amigas en las que te incluyo se que estaran conmigo y yo estare con ellas en loq ue necesiten tal vez con algunas no fisicamente pero se que pasamos por lo mismo y nos comprenderemos...
Me alegra muchismo que te decidieras a contarlo...
Cariños