Sabes que trato que establecerte horarios para determinadas rutinas, pero ese tratar se queda muchas veces en el intento.
Los días lunes y martes tengo que salir volando del trabajo, esos días con papá tenemos que hacer MiKa’s delivery. Hay que llevarte a la casa de la abuela o de la tía hasta que yo llegué del trabajo. Cuando ninguna de la dos esta disponible, no queda más remedio que un traspaso relámpago en la puerta de mi trabajo.
Si te dieron de comer (en el mejor de los casos), regresamos volando a casa para darte un baño, trabajar A.B.A., neurosensoriomotor y leerte un cuento. Pero como el baño te encanta, aprovecho esos momentos para enseñarte, para forzarte hacer cosas que en otras circunstancias no harías, que te quites la ropa (aún tienes dificultad por tu hipotonía en los brazos), o responderme preguntas que en otras circunstancias me dirías “no quiero”. Claro, por ahora son preguntas cuya respuesta ya has memorizado, pero en tu condición son un logro ¡¡¡muy, muy grande !!!!!
Pero lo que anoche, me dio risa y me causo profunda emoción, es que usualmente; un promedio de 05 preguntas son tu boleto de entrada a la tina. Pero ayer te urgía tanto ingresar que te paraste enfrente de mí, me miraste y empezaste a responder a mis usuales preguntas, sin que yo hubiese comenzado a preguntarte:
El conejo come zanahoria.
Las niñas tienen vagina.
La vaca nos da leche
Los huevos nos da la gallina.
Y el caballo nos da, nos da (te mire extrañada porque esa pregunta nunca te había hecho), pero tú respondiste: nos da televisión. Asumí que estabas relacionando los caballos a un video sobre ellos que te encanta.
Cuando íbamos a comenzar a trabajar A.B.A., corriste y te metiste dentro de tu cama, y te cubriste totalmente el cuerpo. Yo sobreactuando empecé a buscarte y al tercer llamado me respondiste: Micaela esta durmiendo y empezaste a emitir un sonido como si estuvieras roncando.
Par mí era claro que estabas cansada y ya no querías trabajar. A los dos minutos, mientras yo iba a buscar un cuento, tú ya te habías quedado dormida.
Entonces reparé en algo que muchas veces me había dicho la psicóloga de tu colegio y yo simplemente no le había dado la importancia del caso. Ella tiene estrategias intelectuales para enfrentar algunas situaciones, sobre todo en contextos donde no puede comunicar sus deseos verbalmente.
Eso me demostró, que le estas dando batalla a este trastorno y anoche hija, le diste un nocaut (knockout).
Los días lunes y martes tengo que salir volando del trabajo, esos días con papá tenemos que hacer MiKa’s delivery. Hay que llevarte a la casa de la abuela o de la tía hasta que yo llegué del trabajo. Cuando ninguna de la dos esta disponible, no queda más remedio que un traspaso relámpago en la puerta de mi trabajo.
Si te dieron de comer (en el mejor de los casos), regresamos volando a casa para darte un baño, trabajar A.B.A., neurosensoriomotor y leerte un cuento. Pero como el baño te encanta, aprovecho esos momentos para enseñarte, para forzarte hacer cosas que en otras circunstancias no harías, que te quites la ropa (aún tienes dificultad por tu hipotonía en los brazos), o responderme preguntas que en otras circunstancias me dirías “no quiero”. Claro, por ahora son preguntas cuya respuesta ya has memorizado, pero en tu condición son un logro ¡¡¡muy, muy grande !!!!!
Pero lo que anoche, me dio risa y me causo profunda emoción, es que usualmente; un promedio de 05 preguntas son tu boleto de entrada a la tina. Pero ayer te urgía tanto ingresar que te paraste enfrente de mí, me miraste y empezaste a responder a mis usuales preguntas, sin que yo hubiese comenzado a preguntarte:
El conejo come zanahoria.
Las niñas tienen vagina.
La vaca nos da leche
Los huevos nos da la gallina.
Y el caballo nos da, nos da (te mire extrañada porque esa pregunta nunca te había hecho), pero tú respondiste: nos da televisión. Asumí que estabas relacionando los caballos a un video sobre ellos que te encanta.
Cuando íbamos a comenzar a trabajar A.B.A., corriste y te metiste dentro de tu cama, y te cubriste totalmente el cuerpo. Yo sobreactuando empecé a buscarte y al tercer llamado me respondiste: Micaela esta durmiendo y empezaste a emitir un sonido como si estuvieras roncando.
Par mí era claro que estabas cansada y ya no querías trabajar. A los dos minutos, mientras yo iba a buscar un cuento, tú ya te habías quedado dormida.
Entonces reparé en algo que muchas veces me había dicho la psicóloga de tu colegio y yo simplemente no le había dado la importancia del caso. Ella tiene estrategias intelectuales para enfrentar algunas situaciones, sobre todo en contextos donde no puede comunicar sus deseos verbalmente.
Eso me demostró, que le estas dando batalla a este trastorno y anoche hija, le diste un nocaut (knockout).
4 comentarios:
Tremendo Knockout, bravo princesa.
Pues si, creo que está hecha una gran peleona. ajaja. Muchas cosas que cuentas me recuerdan a Gloria.
He leído la entrada del colegio, me alegro que al menos no tengas que pasar angustia por no saber dónde escolarizar a tu hija. Espero que le den lo que necesite para desarrollarse al máximo todo el potencial que tiene. Un abrazo.
jajaja me ha encantado lo del caballo!!!
y siiii knockout total!
estaba claro que estaba cansada y te lo dijo como mejor sabía! que eso ya es mucho!!!!!
Premio para la
pequeña
Mika (o Kina?)
y tambien uno para
la entrenadora
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